Una lucha de poder en las calles y plazas de la república
Un presidente corrupto que intentó impedir su destitución mediante un golpe de Estado está en prisión. Ahora sus secuaces provocan el caos en las calles. Hasta el momento, más de 100 policías han resultado heridos. En el estado de Apurimac, donde se encuentra el hospital Diospi Suyana, todas las escuelas permanecen cerradas hasta nuevo aviso. El aeropuerto de Andahuaylas fue ocupado y fuertemente demolido por campesinos enfurecidos. En Cuzco, el aeropuerto está sitiado. El tráfico entre Lima y Cusco (1000 km) se paralizó.
Los sentimientos de los montañeses son una mezcla de profunda decepción y rabia. Por un lado, su aspirante Pedro Castillo se ha mostrado completamente incapaz de mejorar sus circunstancias. Por otro lado, el corrupto Congreso sigue actuando y no quiere convocar nuevas elecciones inmediatamente.
Hay que dudar de que la nueva presidenta, Dina Boluarte, pueda permanecer mucho tiempo en el cargo. Debido al fracaso de la élite política, Perú se adentra cada vez más en aguas turbulentas. Y nadie puede predecir hacia dónde llevará la corriente al país en estos momentos.
El personal del Hospital de la Misión fue ayer andando al trabajo. El trabajo en el hospital era normal. Pero cada nuevo día requiere una evaluación actualizada de la situación. /KDJ
