Eva Ruttinger y Evelyn Schneider
El lunes en Bad Rappenau: El repique de campanas a las 18.00 horas de la iglesia católica Herz Jesu fue un preludio positivo de una buena velada. En el abarrotado salón parroquial, Eva Ruttinger (arriba a la derecha) contó por qué su camino la llevará del sur de Alemania a Perú. Como cristiano convencido, el católico quiere transmitir «el amor de Jesús» a los alumnos de forma muy práctica. Y eso como profesor de inglés. Por último, la influencia de sus abuelos creyentes familiarizó a la simpática educadora con la persona de Jesucristo.
Dos días después, en Schwäbisch Gmünd: Tras la charla del médico de la misión, Evelyn Schneider (arriba a la izquierda) explica por qué a ella también le gustaría trabajar en la escuela Diospi Suyana como profesora de inglés. Eva y Evelyn tienen algo más en común que la «E» de sus nombres. Su compromiso social se basa firmemente en la fe vivida. La fe no como una palabra nebulosa, sino como una confianza firme en el hombre de la cruz que resucitó de entre los muertos al tercer día.
Por eso no es casualidad que ambos pasaran unos meses en el centro de formación cristiana Capernwray. La institución interconfesional del oeste de Inglaterra ha convertido a innumerables jóvenes en portadores del mejor mensaje que existe desde la Segunda Guerra Mundial.
Enhorabuena de antemano a los directores de la escuela Matthias Rehder, Niklas Sierra y Jonathan Rosenkranz por el gran futuro que les espera con dos profesores de inglés de patente. /KDJ


