La vida eterna es de un calibre completamente diferente
Unas 100 personas se reunieron en la iglesia de San Pedro de Leidringen el sábado por la mañana. La iglesia se construyó en 1150 sobre los cimientos de una antigua villa romana. Un servicio religioso está a punto de comenzar en este lugar histórico. La banda toca algunos éxitos de la música de culto moderna y un germano-peruano sube al púlpito. Habla del capítulo 6 del Evangelio de Juan. En aquella época, muchos seguidores de Cristo se apartaron de él, pero los doce discípulos le permanecieron fieles. Pedro había dicho en justificación: «¿Adónde vamos a ir, sólo Tú tienes palabras de vida eterna?».
En sus observaciones, el médico misionero describe la fe cristiana como «la» esperanza de resurrección desde la antigüedad. La revista Focus tituló en su día «Vivir 10 años más» y en el reportaje se daban consejos para ganar tiempo mediante una dieta sana, deporte y un estilo de vida equilibrado. Pero el Dr. John no está satisfecho con este resultado. Dice: «Querida congregación, quiero ser completamente sincero. Diez años está muy bien, pero no la vida eterna» – Y así pasamos a la segunda parte de la afirmación de Jesús sobre la validez de sus palabras. ¿Qué indicaría que el predicador ambulante de aquella época no era un impostor? La lista de argumentos concluye con la referencia a que millones de personas a lo largo de los siglos han tenido sus propias experiencias con el Resucitado -incluidos los empleados de Diospi Suyana.
Sobre la entrada lateral del venerable edificio cuelga una placa con un poema. El contenido trata de la resurrección de los muertos. Desde hace 870 años, los cristianos se reúnen en este lugar y depositan su confianza en aquel que nos prometió la vida eterna en presencia de Dios. El hombre de Nazaret dijo: «¡Yo soy el pan de vida, yo soy la luz del mundo, yo soy el camino, la verdad y la vida!». – Palabras poderosas que contrastan con las frases huecas que sueltan los influenciadores modernos./KDJ
