El contrato de compra se firmará hoy, jueves.
Víctor Moreno, técnico de radio con 35 años de experiencia, se sube a la escalera y toma sus medidas. Doris Manco, Directora de nuestro Centro de Medios, el ingeniero civil Juan Talaverano y el Dr. Klaus John miran detrás de él, embelesados, hacia la gran ciudad de Ayacucho, a una distancia de 15 km en línea recta. Si todo va según lo previsto, el jueves podremos comprar una plaza de 120 m2 y empezar las obras inmediatamente después. Dentro de dos meses, otras 200.000 personas vivirán en la zona de captación de una estación transmisora de Diospi Suyana. Como no tenemos el futuro en nuestras manos, decimos: si Dios quiere.
Ayacucho es una tierra histórica. Siglos antes del Imperio Inca, la zona ya pertenecía a la civilización Wari. El 19 de enero de 1539, los españoles fundaron la ciudad de Ayacucho por orden de Francisco Pizaro. El 9 de diciembre de 1824, las tropas revolucionarias dirigidas por Sucre derrotaron al ejército español a las puertas de la ciudad y Perú obtuvo su independencia. En la década de 1980, un profesor de filosofía de Ayacucho fundó el grupo terrorista “Sendero Luminoso”. En las luchas con las tropas del gobierno murieron 69,000 ciudadanos. En amplias zonas del estado del mismo nombre, los narcotraficantes mandan hoy en día. De acuerdo con la historia, Ayacucho significa “el lugar de los muertos”. Diospi Suyana Radio llegará con su mensaje de fe, esperanza y amor a innumerables personas que han soportado tiempos difíciles en el pasado.
Aunque Ayacucho está a 450 km de Curahuasi, casi 8.000 pacientes llegaron al Hospital Diospi Suyana desde aquí.