Un mensaje misterioso hace 2800 años atrás

800 años antes de Cristo, el profeta Isaías, anunció palabras que resumen en pocos versos la pasión de Jesús. Este párrafo del antiguo testamento se convirtió en un clásico en la literatura mundial.

„El fue despreciado. Marcado por enfermedades y dolores. Su aspecto era insoportable. No queríamos saber nada de el. Hasta lo llegamos a despreciar.

Pero realmente eran nuestras enfermedades las que sufría; el sufrió los dolores que nosotros deberíamos sufrir. Creímos que fue Dios el que lo vendió y lo dejó sufrir, porque lo había merecido. Pero la verdad es que el fue golpeado hasta sangrar porque nosotros rompimos nuestra promesa de fidelidad con Dios. Por nuestros pecados fue clavado. El fue castigado por nosotros. Y ahora nosotros tenemos paz con Dios!. Por medio de sus heridas hemos sido sanados!” ( Isaías 53, 3 – 5)

Podemos traer todas nuestras cargas ante la cruz. Todo aquello que nos sea insoportable de llevar. Todas nuestras experiencias traumáticas de nuestra niñez, como también nuestras dudas y temores.

Nosotros en Diospi Suyana nos sentimos unidos con todas las personas que proclaman a Jesús como su rey y Señor.

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