El señor Peter Heming y el señor B. Borchers en el norte de Alemania, leyeron un artículo sobre el centro hospitalario inca en el Perú. Debido a la afinidad del nombre con su empresa, decidieron apoyar a Diospi Suyana a largo plazo. Una parte determinada de las ventas de aleaciones de oro de dicha empresa serán donadas año por año al hospital misionero en Curahuasi.