Con una colposcopia nuestro ginecólogo puede censurar exactamente el cuello uterino. Una pantalla grande permite a Dr. Hassfeld luego aclarar a los pacientes así como a los médicos ayudantes los resultados.
El utensilio y la pantalla (aprox. 4500 euros) pudieron ser adquiridos con fondos de la fundación Else Kröner-Fresenius.