La familia Haßfeld con las maletas hechas

El viejo dicho no es cierto

Dicen que todo el mundo es reemplazable. La despedida de la familia Hassfeld, sin embargo, revela el sinsentido de esta vieja verdad. Nadie podrá sustituir totalmente al ginecólogo y al jefe del servicio de enfermería. Durante 15 largos años, ambos vivieron en Perú con sus cuatro hijos y trabajaron en puestos directivos.

Ayer fueron despedidos por todo el personal. El programa estaba lleno de sorpresas y el ambiente era estupendo. Pero se le puede dar la vuelta que se quiera, la ocasión sigue siendo triste.

Como explicó la doctora misionera John en su breve discurso de aceptación, la historia de los Hassfeld en Diospi Suyana se remonta a 2004. En ese momento, el Baden Württemberger había leído un informe sobre el proyecto de hospital misionero y se puso inmediatamente en contacto con él. Su contribución durante una década y media es difícil de describir. Los tres libros sobre Diospi Suyana reflejan en cierta medida su valiosa colaboración. Los Hassfeld se esforzaron en muchos campos de trabajo diferentes y dejaron una huella que no se borrará pronto.

La celebración en su honor en la abarrotada iglesia del hospital expresó la gran gratitud de sus colegas. El manido comentario: ¡Te echaremos de menos! – dio en el blanco.

Pero también su estilo de vida personal como pareja y familia fue totalmente convincente. Convivían como cristianos y amigos con peruanos y misioneros en igualdad de condiciones. No sólo se involucraron en sus lugares de trabajo, sino que ayudaron en las comunidades eclesiásticas locales y más allá. El vacío que dejan será lamentado muchas veces en los próximos meses.

Sus hijos Joel, Niels, Marleen y Elias ya son mayores y hace tiempo que están en Europa. El domingo, sus padres también suben al avión con las últimas pertenencias que caben en sus maletas. Sin embargo, esperamos que su corazón permanezca en Curahuasi para siempre.

A partir de 2023, Jens y Damaris se unirán a la asociación Diospi Suyana y aportarán su inmensa experiencia. Al menos eso nos consuela. Que Dios bendiga a los seis Hassfeld y siga poniéndolos como una bendición para muchos. /KDJ

El Dr. Jens y Damaris Haßfeld entran en la abarrotada capilla. Los globos vuelan en el aire.
Acaban de recibir sus regalos. Damaris sostiene un libro ilustrado sobre la vida de los Hassfeld en Perú. Jens lleva una foto del hospital.
La celebración fue festiva y divertida, pero desgraciadamente una despedida.
Los Hassfeld rodeados de cinco músicos mexicanos.
Un gran ambiente en el auditorio
1 Response
  1. Kerney Llano Rosales

    No deberia de faltar medicos como en diferentes especialidades ellos viajan y no hay nadie quien los reemplace la gente va y dicen que no esta o viajo cosa que no deberia pasar.

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