Un viaje de aventura con Dios
Gisela Graf fue uno de los miembros fundadores en 2002. Recuerda: “En aquel momento planeamos un presupuesto de 1 millón de euros, ¡pero no teníamos nada de dinero!” Para el observador externo, la confianza en Dios puede parecer una auténtica locura. Sin deudas ni préstamos, se estableció en Perú una obra de caridad cristiana que anima a los cristianos de todas las denominaciones por sus muchas bendiciones y milagros. El mensaje de Diospi Suyana es: “¡Confiamos en Dios porque es real!”
Los resultados son bien conocidos. Se construyeron un hospital, una clínica dental y oftalmológica, una casa para los clubes de niños, una escuela, una casa de huéspedes y un centro de medios de comunicación con emisiones de radio y televisión. Cientos de miles de pacientes pobres, principalmente indígenas quechuas, han recibido hasta ahora tratamiento médico moderno. La escuela Diospi Suyana no tiene que temer la comparación con instituciones educativas de Europa o Estados Unidos.
En la celebración del décimo aniversario en 2017, el presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski utilizó la fórmula “corazón y experiencia” para describir el trabajo de Diospi Suyana en beneficio del país. Pero las mejores noticias que llegan de Diospi Suyana son muy diferentes. Si es cierto que Dios ha actuado en la historia de nuestro trabajo en el sentido de la evidencia circunstancial, entonces todo ser humano puede sacar esperanza y poner su confianza en este Dios. /KDJ
