La planta ornamental proviene de América del Sur
Un día lleno de dolor y adversidad. Dos pasos adelante y uno atrás. ¿O es al revés?. Un paciente enfermo en cuidados intensivos. Entre esperanzas y temores. Los cuellos de botella y la confusión. La vista se dirige hacia abajo.
Almuerzo en el camino a casa. Enérgicamente en la cima de la montaña yace un árbol azul. Es hermoso a la vista. El azul es el color de la esperanza. Los ojos se deslizan hacia el cielo.
En los últimos días, muchos misioneros han estado orando durante 24 horas en una cadena de oración. Nuestra confianza esta en Dios. Él mantiene las cosas en su mano. Hace tres días, a altas horas de la noche en un pasillo del hospital, dos mujeres quechuas se arrodillaron en el suelo y rezaron. Sus palabras apenas se escuchaban con sus sollozos. Una escena conmovedora. Él; el creador del cielo y la tierra, el creador de este árbol de Jacaranda; me ve y me conoce. Y, por supuesto, yo también / KDJ
