El hospital es patrullado por guardias de seguridad a toda hora ,ya sea por el día o por la noche. Un alambrado rodea el hospital, impidiendo la entrada de personas ajenas. Cámaras de video controlan todo movimiento. Estos datos son grabados en la computadora por varios meses. Puertas eléctricas y ventanas con hierro, impiden cualquier robo o asalto.
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Diospi Suyana trata de proteger al hospital de cualquier tipo de criminalidad. Pero en este mundo no existe la perfecta seguridad, humanamente hablando.
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Por eso la pregunta filosófica es: ¿Cuánto debe invertir en su protección y seguridad, un hospital misionero que confía en Dios?
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(dos Fotos)
