¿Qué quiere decir con esta afirmación?
Marvin Eisner también visitó el stand de Diospi Suyana en la feria de tecnología ortopédica de Leipzig. El ingeniero de producción trabaja para la «Digital Production OT» de Ulm. Lo que oyó sobre el Hospital Diospi Suyana en general y el taller ortopédico en particular despertó su interés.
El 13 de agosto, ofreció su ayuda a Christian Haupt, director de nuestro centro ortopédico, en una reunión de Zoom. Durante esta lluvia de ideas, también surgió la palabra cráneo-ortosis. Como este término no resulta familiar al ciudadano de a pie, es necesario explicarlo brevemente. Algunos bebés nacen con malformaciones craneales, es decir, con dimensiones asimétricas de la cabeza. No se trata simplemente de un defecto cosmético. Si no se trata, pueden desarrollarse enfermedades secundarias. La desalineación del eje auricular afecta al sentido del equilibrio del bebé y dificulta su desarrollo motor. En ocasiones, se desarrollan desequilibrios musculares en la zona del cuello, lo que suele provocar posturas forzadas. El tratamiento consiste en la colocación de férulas externas. Como los huesos del cráneo del niño aún no están firmemente fusionados, es posible moldearlos.
Un día después, el 14 de agosto, Anghy, una de nuestras fisioterapeutas, se pone en contacto con Christian Haupt. En su consulta hay un bebé pequeño que tiene precisamente este problema. La madre ya había viajado a varias clínicas sin recibir ningún tratamiento eficaz para su hijo. Probablemente Marvin Eisner se quedó muy sorprendido cuando nuestro técnico maestro se puso inmediatamente en contacto con él en Ulm. Tras varios cálculos, el técnico creó el archivo correspondiente, que Christian Haupt utilizó para fabricar la órtesis necesaria en su impresora 3D. Una impresión fabulosa y una personalización meticulosa. Ahora la anatomía de la joven paciente vuelve a la normalidad con el atractivo casco azul. Por cierto, el casco se lleva exactamente 23 horas al día. Aunque el pequeño de la foto de arriba parece un poco triste, pronto se acostumbrará al elegante casco.
¿No es extraño? En el momento perfecto, aparece de la nada el paciente adecuado. Se le ayuda y todo el mundo es feliz. Para nosotros, los cristianos, no existen las casualidades. Más bien creemos que Dios determina el momento e interviene en nuestros destinos de forma misteriosa.
